una guia paso a paso para dejar de postponer cosas.

Cualquiera puede sentirse perezoso. Todo ser humano posee cierta pereza natural, lo que lo ha llevado a todo, desde microondas hasta controles remotos. También es una forma de conservar energía.

Si está agotado por un horario sobrecargado, considere restablecer sus prioridades y dar un paso atrás. Si es una falta de motivación, intente cambiar sus hábitos para crear un nuevo entorno inspirador.

La pereza tiene consecuencias negativas en la calidad de vida y retrasa el logro de sus tareas y metas. Si se siente abrumado, la pereza lo paraliza y ya no tiene ganas de hacer nada, aquí hay algunos pasos que puede seguir para combatir la pereza y mejorar su vida diaria:

Organízate

Primero, tome nota de las cosas que pueden retrasarlo en hacer su trabajo y sumérjase en un estado de ánimo adecuado para trabajar. Tenderás a perder el enfoque tan pronto como puedas y hay muchos factores.

Los créditos de tu serie favorita pueden llevarte rápidamente a saltarte lo que tienes que hacer, o charlar con un amigo puede ser mucho más interesante que hacer lo que tienes que hacer. Si sabe que tiene dificultades para disciplinarse por este tipo de cosas, no dude en quitarse el objeto de la tentación.

La primera excusa es buena, no dudes en poner límites.

Si no puede combatirlo, piense que las consecuencias se pueden sentir rápidamente ya que puede entrar en una cadena de estrés. Primero, la idea de ponerse a trabajar puede convertirse en una excusa para el incumplimiento. Pero piensa que a continuación pasa lo peor: cuando llega la fecha límite, tenderás a hacer tu tarea rápidamente, lo que puede afectar la calidad de tu trabajo o incluso significar que no tienes tiempo para hacerlo.

En el caso de un aplazamiento, la idea de tener que rehacer esta tarea al día siguiente volverá a crearle estrés y tendrá que darse cuenta de que no querrá hacerlo mañana más de lo que lo hace hoy.

En el caso de un trabajo hecho rápidamente, no tendrá la sensación de paz y autosatisfacción que conlleva.

Una forma de combatir la pereza es comenzar con tareas pequeñas.

Toma un cuaderno o una hoja y descomprime las cosas que tienes que hacer, punto por punto. Te da una visión global de lo que tienes que hacer y sabes qué esperar. Una vez que complete cada uno de ellos, tendrá la sensación de una tarea cumplida.

La satisfacción que conlleva aumentará su autoestima. En lugar de decirte a ti mismo: "Debería haber hecho esto", estarás conquistando o puedes decir: "Ya lo he logrado. Solo queda lo que queda por hacer".

Aborde directamente lo que tienes que hacer

La otra forma de hacerlo es saltar a las cosas que no te gustan en este momento y decirte a tí mismo, "cuanto antes termine, antes se callará". Una vez terminada la tarea, la sensación de logro debería afianzarse y facilitarle la realización de las demás tareas que le quedan. De cualquier manera, piensa desde el principio que no estarás en paz hasta que lo termines.

Actúa rápidamente sin pensar siguiendo su lista

Una forma importante de hacerlo es poner sus tareas en el orden de procesamiento y asignar a cada tarea una duración.

Esto te permitirá obligarte a completar la tarea a tiempo. Cuanto mayor sea el nivel de detalle, es más probable que esté satisfecho con su progreso. Una vez que tu trabajo esté bien avanzado, estarás concentrado y tenderás a querer terminarlo y concentrarte más y no sentir más la famosa pereza.

No dudes en crear un espacio para ti para estar por delante de tu lista y decirte a ti mismo que te queda mucho tiempo después para hacer lo que quieras.

Ponte a trabajar tan pronto como llegues.

Una de las mayores causas de la pereza es dejar que se afiance. Así que tenga el coraje de actuar. En lugar de embarcarnos directamente en la tarea que tenemos entre manos, preferimos hacer cualquier cosa que no sea útil.

Como resultado, no comenzamos a trabajar hasta tarde, cuando el día está bien comenzado. Salte de inmediato cuando llegue y verá rápidamente los primeros frutos de su trabajo.

Sé alerta a tu cuerpo, tu mente y tu alma.

Dejar de ser vago no significa ser una máquina. Aprenda a intercalar sus esfuerzos con períodos de descanso. Aprenda lo que es bueno para ti y armonícelo.

trabajas durante una hora a la vez, tómate 15 minutos para relajarte ... Micro-siesta, algo de ejercicio, toma un café, en resumen, ¡date un capricho!

Después de cada victoria contra tu pereza, te sentirás más fuerte y ella se debilitará.

Date una recompensa

Para felicitarte por tu trabajo, no dudes en darte un capricho. Entonces asimilarás un buen día de trabajo con recompensa. El primero de ellos será sentir que tienes tu tiempo antes del día siguiente y que puedes aprovecharlo.

Lo más importante es decidir dejar de ser perezoso. Debes ser consciente del impacto de la pereza en tu vida y querer salir de este círculo vicioso.

ahí lo tienes. Espero que estos consejos te ayuden a vencer la pereza. Sigue estos pasos y se más productivo.